miércoles, mayo 11, 2011

Tecnicismos en el populacho, o viceversa.

Como algunos sabréis, la psicología utiliza determinados términos coloquiales, dándole un significado más técnico.

Ejemplo de ello son los siguientes conceptos:

- Extrovertido/introvertido: que se usa coloquialmente para describir a alguien abierto o tímido, respectivamente. Pero que en la jerga psicológica se refiere a aspectos de la personalidad más complejos. En este sentido, un extrovertido tolera más los ambientes ruidosos y con bullicio, de forma que es más probable que acuda a una fiesta que un introvertido (de ahí a asociarlo con alguien abierto, no tímido).

- Depresión: se suele utilizar como sinónimo de tristeza, pero en el ámbito clínico es un trastorno del ánimo que implica una serie de síntomas con una gravedad y temporalidad determinadas.

- Doble personalidad: antaño se denominaba así al trastorno que todos conocemos. Sin embargo, actualmente quedó descartado, pues es bien sabido que los que cursan esta patología suelen tener más de dos "personalidades" (o "alter ego", más bien), de forma que pasa a denominarse "trastorno de personalidad disociativa". Como curiosidad, han llegado a darse casos de personas con hasta 15 alter egos distintos.

- Dislexia: éste es, sin duda, uno de los más utilizados, no siempre de forma correcta. Cuando alguien hace referencia a la dislexia normalmente entiende por aquellas confusiones entre letras, típicamente la "d" y la "b". Esto es, no obstante, bastante simplista, aunque no erróneo del todo. Así, dislexia es dificultades en la lectura, y abarca aspectos diversos de ella.

- Finalmente, un término típicamente psicológico pero realmente mal utilizado, y en el que quiero terminar de explayarme en este post, es el famoso psicópata:

Coloquialmente, es utilizado por medios de comunicación, así como en conversaciones cualquiera, para definir a aquellas personas que cometen delitos sangrientos bajo circunstancias extrañas (es decir, no el típico homicidio en defensa propia, sino matar a los padres, o liarse a tiros en la calle, por ejemplo).
Sin embargo, técnicamente un psicópata es todo aquel que tiene una psicopatología, o trastorno psicopatológico, y esto abarca desde una depresión hasta una anorexia, pasando por la esquizofrenia o el autismo.
Lo que pasa es que tradicionalmente se asociaba al psicópata con el trastorno de personalidad antisocial, que sí son aquellos que suelen ser calculadores, sin empatía, con problemas legales de diversa índole etc. Pero si nos ponemos técnicos, no deberían denominarse psicópatas.


Así, si queremos hablar de forma coloquial, pase, pero si nuestra intención es ponernos técnicos, hay que tener mucho cuidado con lo que se dice, pues invita a confusión. Aprovecho para recordar que la orientación sexual nada tiene que ver con la identidad sexual, siendo habitualmente confundidos e incluso utilizados indistintamente.